Es natural que la epidemia causada por COVID-19 haya generado preocupación entre las personas al pensar en la posible transmisión a través de los alimentos y el agua.
Al inicio de la pandemia se tenían muchas dudas y preguntas. Una de ellas, entre todas las personas y comunidad científica, era lo relacionado a la transmisión de la enfermedad. Con los conocimientos y experiencia adquiridos se ha visto que, el COVID-19 es una enfermedad producida por un virus que se transmite de persona a persona a través del aire.
El virus se transmite a través de las gotitas respiratorias que llevan el virus causante de COVID-19, de una persona infectada, a otra que está a 2 metros o más cerca al toser, estornudar o hablar.
No es muy común, pero puede haber contagio a través del aire cuando partículas muy pequeñas del virus permanecen en el aire por minutos u horas infectando así, a otros que están en el mismo lugar, aunque la persona infectada esté lejos o se haya ido de ese lugar.
El virus SARS-CoV-2, no se transmite por los alimentos. Existen virus como el de la hepatitis A, en donde el contagio ocurre al consumir alimentos contaminados. La probabilidad de que los alimentos transmiten el coronavirus es la misma que con cualquier otro objeto receptor, por el contacto externo con el virus. De tal forma que si compramos un alimento que alguien con el virus en las manos lo haya tocado o tosido encima la mejor medida preventiva es no tocarse la cara, lavar los alimentos lo antes posible y el lavado de manos con agua y jabón.
Poner en práctica las medidas indicadas por las instituciones de salud es importante para reducir el riesgo de contagio por COVID-19. Aquí nombramos a las principales:
- Lavar las manos constantemente.
- Uso del cubrebocas.
- Respetar las normas higiénicas que tengan los establecimientos.
- Uso de gel antibacterial.
- Distanciamiento establecido.
- Evitar tocar alimentos y productos innecesariamente.
- Tener especial cuidado con aquellas superficies de elevado contacto en los supermercados, como puertas de refrigeradores o mangos de los carros o canastillas.
- Llevar a mano gel antibacterial y desinfectar las manos mientras se esté fuera de casa.
- Evitar tocarse la cara.
- Lavar las manos siempre al entrar a casa.
Los estudios a lo largo de la pandemia han confirmado que el virus no se contagia por ingestión. No se tiene evidencia de que alimentos o envases hayan sido en algún momento fuente de trasmisión de la enfermedad.
Fuentes:
https://hospitalesangeles.com/covid-19/articulos/coronavirus-y-alimentos.php
https://www.ocu.org/alimentacion/seguridad-alimentaria/noticias/no-covid-alimentos